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Mostrando las entradas de julio, 2022

¿Hay alguien ahí afuera?

  (Olivia está tomando una caña y comiendo olivas en una mesa en la terraza de un bar a orillas del mar en Barcelona y llega Isa, su mejor amiga). (Isa saluda con un beso a Olivia, se sienta frente a ella, mira el mar y se pide otra caña). ISA: - Hola amiga, ¿cómo estás? Perdón que me demoré, no encontraba lugar para dejar la bici. OLIVIA: - Hola gordi, tranquila, no hay problema. Aproveché el rato que estuve sola para pensar en varias cosas que tengo en la cabeza. ¿Vos cómo estás? ISA: - Yo muy bien, con ganas de que sea fin de semana pero no me quejo, todo va viento en popa. A ver, contame, ¿qué anda pasando por esa cabecita? OLIVIA: - Bueno, más de lo que venimos hablando últimamente. Ya me siento un poco pesada y redundante hablando siempre de lo mismo, perdón. ISA: - Gorda, no seas naba. Te dije mil veces que podes hablar conmigo las veces que sean necesarias sobre lo que quieras, siempre te voy a escuchar. No sos pesada, estás en un momento especial y está bien. ...

El monólogo de Olivia

  (Olivia sentada en una mesa en la terraza de un bar a orillas del mar en Barcelona) (Se pide una caña y unas olivas y se queda mirando fijo el mar) ¿Qué quiero hacer de mi vida? A ver, tengo claro una cosa... Quiero ser feliz, quiero estar tranquila, vivir bien, viajar y no estresarme por cosas que tienen solución. Fácil decirlo, pero... ¿Cómo llego a eso? Vengo de una seguidilla de trabajos que por una u otra razón no me dan la tranquilidad que estoy buscando. Yo quiero trabajar para vivir, no al revés, pero también quiero hacer algo que me guste. Lo que más amo es escribir pero hoy en día los trabajos de comunicación van ligados 100% a redes sociales y estoy cansada de manejarles las redes a otros. Con las mías me divierto, las de los otros me esclavizan. Las redes no tienen fin de semana, no cortan nunca y, por ende, no puedo desconectar nunca yo. O si al menos me pagaran lo que mi trabajo y tiempo valen, pero evidentemente aún me quedan cosas por aprender porque se me sig...

Lo que dura un piti

  Son las 20h y es la hora en la que Marta, como cada día, sale a fumarse un piti mientras conversa con los vecinos. Marta trabaja en una tienda como dependienta hace más de dos años. No cree que sea el trabajo de su vida pero la verdad es que está tranquila, los horarios no son tan terribles y se hizo buenos amigos. En la tienda vende sombreros y algunas cosas más. Entra al mediodía a trabajar y cierra el local a las 21h. Si ritual diario es, entre otros, el piti de las 20h., sabe que la jornada laboral está llegando a su fin y esa es su manera de relajar y comenzar a bajar de un día largo de trabajo. Se apoya contra la pared, enciende el cigarrillo y observa a la gente que pasa por la calle. Cada tanto saluda a uno que otro, se queda hablando con Ramón, el de la tienda de al lado, sobre la cantidad de turistas que pasaron hoy por ahí o simplemente mira la escena que se le presenta en ese momento. Se lo fuma con calma, calada a calada, mientras piensa en cosas banales, en qu...

Amor y lluvia de verano

  Nacho y María están sentados en un café, tomando algo con sus dedos entrelazados, jugueteando en silencio. De repente, sopla un viento y a María se le revuelve todo el pelo. Ambos se miran, aún en silencio, y María, sin acomodarse el pelo, explota en una carcajada seguida por la de Nacho que intentó aguantarla hasta que ya no pudo más. Están un momento riéndose hasta las lágrimas, María se acomoda el pelo y ambos suspiran sonriendo. Se miran con esos ojos que transmiten el amor profundo que se tienen y que hasta puede sentirse desde afuera hasta que Nacho rompe el silencio: NACHO: - Gracias por este fin de semana tan hermoso. Me encantó acampar con vos y que conocieras a mi familia de Barcelona. (María le toma con las dos manos la mano de Nacho con la que jugaba previamente) MARÍA: - Gracias a vos por este finde y por haberme presentado a quienes son tan importantes para vos. Me hizo muy feliz. NACHO: - A mí también, lo disfruté mucho y les caíste súper bien a ellos. ...

Performar (en) la realidad - UNO

  El cielo empieza a tomar un color gris oscuro, se levanta viento y la gente mira el cielo y apura el paso. En el bar de la esquina, sentado en una mesita de afuera está Pepe tomándose una caña mientras mira, absorto en sus pensamientos, cómo sus tres chihuahuas juegan a sus pies. No deja de darle vueltas al tema del trabajo que lo tiene en un sube y baja emocional hace más de un mes ya. Qué debería hacer o, más bien, qué puede hacer. No deja de pensar que se están aprovechando de él, que está dejando todo y más en un lugar donde no lo valoran ni le dan un cuarto de todo lo que el ofrece. Se pasa a veces más de 10 horas por día trabajando para algo que sabe, no lo merece. El trabajo le encanta y está aprendiendo mucho, es una gran experiencia y esa fue la razón por la que, en un principio, aceptó las condiciones. Estas condiciones eran entrar con contrato de prácticas, pagándole muy poco (y cuando digo muy, es MUY poco) pero a cambio de una gran experiencia, de aprender mucho pe...

Esta imagen soy yo

  Monólogo 1 Ella es Emilia, es mi hermana menor, la más chica de 5 hermanos. Tiene 13 años cumplidos hace poquito, el mismo día que otro de nuestros hermanos, Fede, pero que cumplió 30 años. Si, son mellizos pero con varios años de diferencia. Igual les decimos mellis. Yo soy Flor, la más grande de los 5, tengo 33 años. Emilia y yo somos los extremos de los hermanos, yo la más grande y ella la más chiquita. Tenemos 20 años de diferencia y quizás fue eso lo que nos llevó a tener una conexión mágica casi desde el día uno que nos conocimos, cuando nació. Quizás es mezcla de admiración y profundo amor lo que sentimos, incondicionalidad. Ella es chiquitita, aniñada. Tiene mucho pelo y no sabe manejarlo muy bien, igual que yo cuando tenía su edad. Es de piel blanca pero cuando está al sol se broncea de un color moreno hermoso. Me daba la impresión de que iba a ser bajita pero cada día está más alta, ya casi me alcanza a mí. Y es que sus papás son altos, la verdad. Es una nena ...

Piensa un recuerdo

  Cuarto de los abuelos. 18h del 12 de febrero. FLOR: Te amo abulita, tranquila. (La abuela acostada en su cama respira con dificultad, balbucea) FLOR: No, no. No intentes hablar que te vas a agitar. No te preocupes, todo está bien abu. Quiero que sepas que te amo mucho y que está todo bien, podes ir tranquila. No es justo que estés sufriendo así, la venís peleando hace rato ya, es tiempo de descansar. ABUELA: Gracias mi amor. Yo estoy bien. (Con una voz casi inaudible y entrecortada por la falta de aire) FLOR: Te amo mucho, sos una de las personas más importantes para mí. Siendo egoísta me gustaría que estuvieras siempre conmigo, pero mereces paz, mereces estar tranquila y sin dolor. (Se le empiezan a caer algunas lágrimas. Se asoma la Mamá de Flor y se va ) ABUELA: Yo también te amo mucho, tienen que estar siempre juntos y cuidarse. (Se dan la mano. Flor aprieta levemente la mano de su abuela) FLOR: Si abulita, vamos a estar juntos. Sobre todo no te preocupes...

De poemas y otras cosas

  Ser feliz es fácil El olor a café por la mañana que inunda el ambiente, las tostadas que saltan y el sol que asoma lentamente. Cerrar los ojos y respirar aire fresco sentirse agradecido de estar vivo. Ya lo dijo Marcial en su poema “querer ser lo que eres nada más”. Libre, sin molestar a nadie siempre buscando la mejor versión que nos acerque a la pasión de sentir, siempre y mucho hasta que se nos acaben los cartuchos y podamos decir mierda que vale la pena estar vivos. Y, de nuevo, como decía el gran Marcial “nunca un pleito, pocas veces las formalidades, una mente tranquila;” Porque es necesario vivir así, en paz, en armonía, con salud y sin vueltas.

Un día de la vida

  Son las 7 de la mañana y el primer rayo de sol le da directo en el ojo. Sofía no dormía profundo, apenas dormitaba con los ojos entreabiertos y esa luz intensa la sacó del trance en el que se encontraba. Hacía días que no dormía realmente, se pasaba la noche entera girando y dando vueltas en la cama, estudiando el techo y cada una de las sombras que se formaban con las siluetas de los árboles que entraban por la ventana. Esa mañana se quedó tendida en la cama un rato más de lo habitual, buscaba una respuesta aunque no sabía aún cuál era la pregunta. Había algo en su interior que la incomodaba, que la hacía mantenerse en su cabeza la mayor parte del tiempo tratando de descifrar aquello que estaba perturbándola. Le echaba la culpa a la luna, a las hormonas, al tiempo que hacía que no veía a su familia, a la búsqueda de trabajo, al dinero, al amor. No lograba identificar qué era lo que le estaba pasando, tampoco podía explicarlo. ¿Estaba triste?, ¿nostálgica?, ¿deprimida?, ¿confun...

Tu propio Laocoonte

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  Olivia tiene 32 años, es argentina y vive en el exterior hace un tiempo. Tiene una vida feliz y, en general, es alegre y optimista. Siempre se preocupa por que todos a su alrededor estén felices y no les falte nada. Pero le suele pasar que cuando ella necesita algo, no sabe dárselo con el mismo amor con el que se los da a otros, no se tiene la misma paciencia que a los demás y, comúnmente, no se deja pasar una y se castiga mucho cuando algo no sale como esperaba. En sus días oscuros, que suelen ser los menos pero intensos, le cuesta mucho ver lo positivo de las cosas, se centra en los detalles menos importantes y que no suman y no puede ver todo el trabajo que hizo para estar donde está hoy. Ella es un alma libre, que reparte felicidad a donde quiera que vaya pero, en su interior, se debate una constante lucha entre lo que ella quiere ser y lo que le imponen desde el afuera. Se define la oveja negra porque no está en sus planes hacer las cosas de la manera en que su familia “...

¿Por qué leer?

  Es una pregunta más compleja de lo que pensamos cuando la leemos por primera vez. Sin dudas, hay que leer siempre. Soy una fiel creyente de que a base de lectura se aprende. Se aprende de todo, a escribir, sobre ortografía, gramática, sobre palabras. Leer enseña. Leer te abre puertas a mundos que no creías posibles. Te invita a creer y crear en tu cabeza y, por qué no, en tu realidad también, materializando ideas a partir de la motivación obtenida gracias a alguna lectura del momento que te quito la venda de los ojos y te hizo sentir que de verdad eso que querías, era posible. La lectura te genera esa ilusión de que todo puede pasar, de que es posible alcanzar lo que te propones. De que lo que crees, existe y está a tu alcance. ¿Por qué leer? Porque alimenta la imaginación, algo increíblemente positivo para quienes amamos las letras. Te da ese contenido para poder armar lo que quieras, para poder hilvanar esas ideas, darles forma y crear historias, personajes, ideas.. tod...